Redacción y Referencias
Tendrás que comprender los principios generales que se aplican al citar fuentes y tomar medidas para evitar el plagio.
Redacción y Referencias
Hay muchos tipos diferentes de escritura que se requieren para estudiar, desde tomar notas hasta el análisis y la discusión crítica. Tus habilidades de escritura se desarrollarán considerablemente a lo largo de tus estudios.
La redacción es una parte importante de la evaluación en la universidad, por lo que vale la pena aprender a disfrutar del proceso y pensar en cómo podrías seguir mejorando tu estilo de redacción.
Las referencias precisas son importantes en todo trabajo académico. Como estudiante, tendrás que comprender los principios generales que se aplican al citar fuentes y tomar medidas para evitar el plagio.
Este módulo incluye lo siguiente:
Habilidades de escritura
Redacción de ensayos
Investigar tu ensayo
Poner la pluma sobre el papel
Referenciar y evitar el plagio
Tomar notas
Interpretación de las preguntas del ensayo
Planificación del ensayo
Revisar tu ensayo
Comprobar si tu trabajo es un plagio
Estudiantes adultos: Actividades de escritura.
1. Habilidades de escritura
Descubrirás que tus habilidades de escritura se desarrollan significativamente mientras estás en la universidad porque normalmente hay tareas escritas que completar para cada módulo, unidad u opción. Tu ortografía y vocabulario también mejorarán. En esta sección, puedes leer más sobre el proceso de escritura y cómo conseguir las mejores notas en tus tareas.
Véase la guía sobre habilidades de escritura:
2. Redacción de ensayos
Hay cinco etapas distintas en la redacción de un ensayo: interpretación de la pregunta; investigación; planificación; redacción; y revisión.
Si omites alguna de ellas o simplemente las haces a toda prisa, surgirán ciertos problemas familiares en tu redacción: irrelevancia, estructura débil, pruebas y ejemplos insuficientes para apoyar tus argumentos, falta de fluidez entre párrafos, argumentos incoherentes y muchos otros.
También es importante separar cada etapa, dejando tiempo entre cada una de ellas. Esto no solo te permite volver a tus ideas con frescura, de modo que puedas ver cuáles de ellas necesitan ser editadas, sino que también descubrirás que tus ideas y argumentos se han desarrollado mientras tanto.
El contenido está en esta guía:
3. Investigar tu ensayo
La investigación es la base de cualquier ensayo: si no tienes nada que decir, ¿cómo puedes escribir un ensayo? Sin embargo, la investigación es un proceso con muchos componentes. La lluvia de ideas es una excelente manera de iniciar este proceso. Sin embargo, tus habilidades de lectura son tan importantes para la calidad de tu investigación como tus habilidades para tomar notas y un sistema de recuperación eficaz.
Lluvia de ideas
Es un tiempo muy bien empleado como parte de tu estrategia de investigación. No es una tarea que requiera mucho tiempo, pero te ayudará a utilizar más tus propias ideas y a evitar perder tiempo en tu investigación. Una vez que hayas aprendido a hacer esto, podrás aclararte dos cosas importantes antes de comenzar tu investigación:
Lo que sabes sobre los temas que plantea la pregunta del ensayo.
Las preguntas que quieres que respondan tus fuentes.
Si comienzas tu investigación sin hacer esto, es probable que sucedan ciertas cosas:
Los autores que leas te dictarán: sin tus propias ideas para protegerte, será difícil, a veces imposible, resistir la atracción de sus ideas y la persuasión de sus argumentos.
Como resultado, te encontrarás aceptando el caso que desarrollan y los juicios que emiten sin evaluarlos lo suficiente, incluso copiando grandes secciones del texto en tus propias notas.
Te resultará difícil evitar incluir en tu ensayo una gran cantidad de material que es bastante irrelevante para tus propósitos. Todo este material puede haber sido relevante para los propósitos del autor cuando escribió el libro, pero sus propósitos rara vez son idénticos a los tuyos.
Sin embargo, después de haber pasado días acumulando esta gran cantidad de notas, es difícil encontrar el desapego para decidir que la mayoría de estas notas son irrelevantes para tu ensayo y tienes que deshacerte de ellas. Todos somos más propensos a intentar convencernos de que pueden «hacerse» relevantes, y terminamos incluyéndolos en un ensayo largo, discursivo y sin forma, en el que el examinador se siente frecuentemente perdido en una masa de material irrelevante.
Debido a que no has revelado lo que sabes y piensas sobre el tema, te será mucho más difícil procesar las ideas que leas, hacerlas tuyas y luego usarlas de manera convincente.
Habilidades de lectura
La mayoría de nosotros pasamos horas leyendo textos que no necesitamos leer. Para evitarlo, debes leer con un propósito: necesitas tener claro por qué estás leyendo un texto en particular, qué preguntas necesitas responder y qué estrategia de lectura es la más relevante para este propósito.
Muchos de nosotros adquirimos el hábito de leer cada pasaje palabra por palabra, independientemente de nuestro propósito al leerlo, cuando en realidad podría ser más eficiente hojearlo o escanearlo. Adoptar un enfoque más flexible de nuestra lectura de esta manera nos libera más tiempo, de modo que podemos leer sobre nuestro tema y asimilar más ideas e información. También nos da más tiempo para procesar las ideas no solo en estructuras más claras que podamos recordar con mayor claridad, sino también de manera que nos permitan criticar y evaluar lo que leemos, en lugar de simplemente aceptar lo que el autor nos dice.
Para más consejos, consulta estrategias de lectura.
Tomar notas
La clave para tomar buenas notas es tener clara la estructura. La mente recuerda estructuras, no listas ni párrafos de prosa continua. Así que manténlo libre y ordenado. No te convenzas de que, a menos que incluyas este hecho, nunca lo recordarás. Lo harás. La estructura actuará como una red que sacará a la superficie de tu mente más de lo que nunca pensaste que podrías recordar. Pero tiene que ser una buena red, bien construida, con conexiones lógicas claras y libre de todo material innecesario.
Recuérdate a ti mismo que tienes buena memoria si la ayudas con estructuras claras. Intenta no dejarte seducir por registrar cosas que «podrían» ser útiles en el futuro. Inevitablemente, esto da lugar a montones de notas que oscurecen la estructura principal, que es el único medio por el que podemos recordarlas en primer lugar.
Para más consejos, consulta Hacer notas.
Haz un esquema de tu escrito
Reescribir cada borrador de tu escrito lleva tiempo. Cuanto más tengas que cambiar, más tiempo llevará. Por eso merece la pena desarrollar un esquema detallado de tu escrito. Puedes reorganizar tu plan según sea necesario y construirlo progresivamente hasta completar tu borrador final.
Un sistema de recuperación eficaz
Si queremos generar y utilizar más ideas y conocimientos propios, tendremos que dedicar algo de tiempo a organizar una estrategia de investigación eficaz. La clave para ello es contar con un sistema de recuperación que sea lo suficientemente adaptable como para captar el material cuando y dondequiera que se muestre, y que nos proporcione un medio para acceder a él fácilmente cuando queramos.
Crear un sistema así no es difícil, pero implica ir más allá de la carpeta de hojas sueltas, unos cuantos archivadores y una fuente fiable de papel A4. Requiere un enfoque reflexivo, un poco de imaginación y, sobre todo, flexibilidad. A menos que elijamos y organicemos sus diversos componentes con cuidado, es probable que perdamos la mayoría de nuestras mejores ideas y que el trabajo que realicemos sea predecible e imitativo de las ideas que nos han dado.
En pocas palabras, nuestro sistema debe promover, no frustrar, la calidad de nuestro trabajo. Esta no es una parte sin importancia de nuestro patrón de estudio, y su influencia nunca es neutral. Hazlo bien y podemos encontrarnos con una gran cantidad de ideas perspicaces que son genuinamente nuestras. Hazlo mal y nuestro trabajo lucha por elevarse por encima de lo mundano y lo imitativo.
Por lo tanto, piensa en llevar un cuaderno, llevar un diario, utilizar un sistema de fichas y usar una caja de proyectos.
Para más consejos, consulta referencias y plagio y habilidades de escritura.
4. Poner la pluma sobre el papel
Cuando empieces a escribir tu ensayo, debes ser consciente de la estructura clara de un escrito y del estilo que estás utilizando. Después de la introducción, piensa en los párrafos y en el uso de las pruebas. Una buena conclusión debe entonces unir todo.
Estilo
Gran parte de lo que consideramos estilo equivale al uso económico de palabras y frases. Cada componente de una frase debe tener una razón de ser: debe tener una función claramente definida. No debe haber esfuerzo desperdiciado: no deben haber palabras o frases innecesarias que oscurezcan el significado de la oración. De lo contrario, se perderá la claridad de tu pensamiento, dejando al lector preguntándose qué significa todo.
Como guía práctica simple, ten en cuenta lo siguiente:
Elige la palabra corta y simple en lugar de la larga y oscura.
Usa la voz activa.
Confía en los sustantivos y verbos para transmitir tu significado.
Reemplaza las frases preposicionales con preposiciones.
Crea fluidez a través de las transiciones.
Introducción
Hay muy pocos estudiantes que no consideren la introducción como uno de los aspectos más difíciles de escribir un ensayo. Esto se debe en gran parte al hecho de que la mayoría de nosotros no estamos seguros de lo que debemos hacer en la introducción. Si no sabemos por qué hacemos algo, no deberíamos sorprendernos demasiado al descubrir que no somos particularmente buenos en ello. Por lo tanto, fíjate objetivos simples y claros que quieras que tu introducción cumpla. Estos deben incluir dos cosas:
La interpretación de la pregunta (¿a qué se refiere?)
La estructura de tu respuesta (el mapa que el lector va a seguir).
De esta manera te asegurarás de que los examinadores se den cuenta de la relevancia de tu enfoque de la pregunta y de que no se pierdan al tratar de seguir tus argumentos e ideas.
Párrafos
Muchos estudiantes no están seguros de la longitud que deben tener los párrafos, de cuándo deben empezar y terminar, e incluso de lo que se espera que hagan en ellos. Es útil utilizar una fórmula sencilla:
En primer lugar, introduce el tema del párrafo con una frase temática clara, que retome un tema que ya hayas analizado en la introducción. Vincular cada párrafo a la introducción de esta manera creará un ensayo tenso, cohesionado y bien razonado. Siempre que sea posible, utiliza una transición al principio de la oración temática para crear fluidez entre los párrafos o para indicar la dirección de tu argumento. Sin estos indicadores lógicos, los lectores pueden perderse fácilmente al preguntarse qué estás haciendo y por qué es relevante.
A continuación, desarrolla el tema del párrafo mediante el análisis, la crítica y el debate.
Por último, completa el párrafo con pruebas y ejemplos que ilustren y respalden los puntos que has planteado.
Uso de pruebas
Sin duda, este es uno de los aspectos más descuidados de nuestra escritura. Tendemos a suponer que todo lo que tenemos que hacer es seleccionar nuestras pruebas e insertarlas en nuestro ensayo cuando nuestros argumentos necesitan apoyo. Sin embargo, las pruebas que utilizamos sirven para mucho más que para apoyar e ilustrar nuestros argumentos. Utilizadas con cuidado, pueden ayudarnos a cambiar el ritmo de nuestra escritura, haciendo que nuestro ensayo sea más legible. Y no hay ningún otro componente de nuestros ensayos que pueda atraer tan eficazmente las respuestas empáticas de nuestros lectores. Verás, pues, que si examinas detenidamente la forma en que utilizas las pruebas, no solo podrás hacer tu trabajo más interesante, sino que también podrás darle un impacto real.
Conclusiones
Una vez que hayas llevado a tus lectores a buen puerto sin perderlos ni confundirlos en cuanto a la relevancia de tus argumentos, poco puedes hacer ahora para debilitar tu trabajo. Sin embargo, todavía hay problemas que pueden atrapar a los incautos. Puedes hacer cualquiera de las siguientes cosas, pero sobre todo trata de crear cohesión en tu trabajo vinculando la conclusión a la introducción:
Da tus opiniones siempre que coincidan con la fuerza de tus argumentos.
Resume los puntos principales.
Retoma el tema de la introducción.
Sugiere implicaciones más amplias.
Predice tendencias futuras.
Para más consejos, consulta referencias y plagio y habilidades de escritura.
5. Referenciar y evitar el plagio
Una referencia precisa es importante en todo trabajo académico. Como estudiante, tendrás que comprender los principios generales que se aplican al citar fuentes y tomar medidas para evitar el plagio.
La referenciación es el proceso de reconocimiento de las fuentes que has utilizado al escribir tu ensayo, trabajo o pieza. Permite al lector acceder a tus documentos de referencia de la forma más rápida y sencilla posible para verificar, si es necesario, la validez de tus argumentos y las pruebas en las que se basan.
Plagio es un término que describe el uso no reconocido del trabajo de otra persona. Esto incluye material o ideas de cualquier fuente (publicada o no publicada), ya sea impresa, basada en la web (incluso si está disponible gratuitamente) o audiovisual. El uso de las palabras o ideas de otros sin hacer referencia a su fuente se interpretaría como plagio y es una ofensa académica muy grave. A fin de cuentas, se considera como un robo de propiedad intelectual.
Se consideran formas de plagio las siguientes:
Hacerte pasar por autor de un trabajo que es parcial o totalmente obra de otro estudiante.
Citar y hacer referencia a fuentes que no has utilizado.
Citar, resumir o parafrasear material de tu trabajo sin citar la fuente original.
«Reciclar» un trabajo propio que has presentado anteriormente para otro módulo o curso (es decir, autoplagio).
Véase más en el módulo correspondiente.
6. Tomar notas
Tomar notas es esencial. El acto de escribir o grabar notas ayuda a la memoria motora, visual y auditiva. Esto hace que el tema sea más fácil de recordar. Puedes obtener más información sobre cómo tomar notas en la guía sobre este tema.
El contenido está en esta guía:
7. Interpretación de preguntas de desarrollo
Interpretar la pregunta no solo te ahorra tiempo, porque evitas pasar horas tomando notas irrelevantes e inútiles, sino que también te da una idea más clara de lo que la pregunta quiere decir y una mejor comprensión de lo que el examinador está buscando en tu trabajo.
Aún más, te da la oportunidad de involucrar tus propias ideas y percepciones en una etapa temprana. Sin esto, tu trabajo puede parecer rutinario y predecible: en el mejor de los casos, solo el reciclaje de ideas que dominan el tema. Entonces, ¿qué debes buscar cuando interpretas una pregunta? Todas las preguntas de ensayo te dicen dos cosas:
1. Estructura
Al interpretar la pregunta cuidadosamente, podrás desentrañar la estructura que debe adoptar tu ensayo para que trates de manera relevante todos los temas que plantea.
2. El rango de habilidades
También revelará el rango de habilidades que el examinador espera que uses al responder la pregunta. De lo contrario, es posible que te encuentres escribiendo un ensayo que describe en gran medida el tema, cuando el examinador te pide que lo analices y discutas críticamente.
8. Planificación del ensayo
Antes incluso de empezar a escribir la primera frase de tu ensayo, necesitas planificarlo. La planificación en un examen es vital para que puedas producir un ensayo de primera clase.
Planifica tu ensayo
Planificar tu ensayo te ayuda de tres formas importantes:
A. Estructura
El plan le da a tu ensayo una estructura clara para que los examinadores la sigan mientras navegan a través de ideas y argumentos que no les son familiares. Sin esto, es probable que los pierdas, y si no pueden ver por qué tus argumentos son relevantes, o no pueden ver lo que estás haciendo y por qué, no pueden darte notas, sin importar lo bueno que sea tu trabajo.
B. Tus argumentos
Te ayuda a asegurarte de que todos tus argumentos están expuestos de forma clara y coherente, y de que tienes pruebas suficientes para respaldarlos. También reduce el riesgo de omitir alguna sección o argumento realmente importante que sea fundamental para las cuestiones planteadas en el ensayo.
C. Tu redacción
Al ensayar tus argumentos en detalle, evitarás el problema de intentar hacer las dos cosas más difíciles al escribir al mismo tiempo: concretar tus ideas con claridad y luego reunir las palabras y frases que las transmitirán con precisión.
Planificar en un examen
Dedica los primeros cinco a diez minutos a escribir tu plan antes de empezar a escribir el ensayo. No te dejes llevar por el pánico y escribas demasiado pronto antes de haber agotado todas tus ideas y haberlas organizado en un plan coherente y bien estructurado, que responda a la pregunta con estricta pertinencia.
De hecho, tiene mucho sentido planificar todas las preguntas que tienes que hacer, antes de coger el bolígrafo para escribir la primera. Cada vez que planificas un ensayo pides a tu subconsciente que responda a preguntas y desentierre material que no puedes recordar. Excepto en las preguntas más difíciles, siempre hay argumentos, puntos, pruebas y ejemplos que no puedes recordar exactamente. Sin embargo, al identificar el problema en la fase de planificación, habrás entrenado a tu subconsciente y, mientras escribes otra pregunta, estará ocupado desenterrando lo que necesitas.
Para más consejos, consulta referencias y plagio y habilidades de escritura.
9. Revisar tu ensayo
Revisar para una pregunta de ensayo puede no ser tan sencillo como aprender que 1+1=2, pero existen muchas técnicas para tener éxito en el examen.
Revisar para el examen
Intenta repasar para el examen planificando todas las preguntas típicas que se plantean sobre cada uno de los temas sobre los que piensas escribir en el examen. Una vez que hayas hecho esto, verás que estos planes representan el material básico para tu repaso. Todo lo que tienes que hacer entonces es memorizarlos y ponerte a prueba para ver si puedes recordarlos en diez minutos, como tendrás que hacer en el examen.
Como consecuencia, la revisión será mucho menos desalentadora. En efecto, sabes que si hay, digamos, seis temas que aparecerán en el examen, y hay cuatro preguntas típicas sobre cada tema, entonces solo tienes 24 planes de ensayo para memorizar y recordar en condiciones cronometradas. La mayoría de nosotros podemos hacer frente a esto sin ningún problema. Incluso si no te hacen exactamente la pregunta que has revisado en el examen, tus planes estructurados te ayudarán a recordar todo el material que necesitas.
Lista de revisión de ensayos
¿He interpretado a fondo las implicaciones de la pregunta? ¿Me he dejado algo?
¿Analiza la introducción las implicaciones con claridad y da al lector una indicación clara de la estructura de mi respuesta?
¿He organizado el material de forma lógica?
¿El ensayo pasa con fluidez de una sección a la siguiente, de un párrafo a otro?
¿Presenta cada frase temática el tema de cada párrafo con claridad?
¿He desarrollado cada argumento lo suficiente?
¿He dejado mis argumentos claros, o hay pasajes difíciles que se beneficiarían de ser reescritos?
¿Apoyo cada argumento con suficientes pruebas y ejemplos?
¿Funcionan realmente todos mis ejemplos y pruebas?
¿He mostrado, en lugar de contar, al lector siempre que he podido?
¿He respondido a esta pregunta en particular de manera relevante?
¿He tratado todas las implicaciones de la pregunta que identifiqué en la etapa de interpretación?
¿Las he cubierto con suficiente profundidad?
¿He dedicado demasiado tiempo a cuestiones menos importantes, mientras que he tratado de forma superficial cualquiera de las cuestiones principales?
¿He presentado un caso convincente, que podría justificar con confianza en una discusión?
En la conclusión, ¿he evitado introducir nuevas ideas que no se han tratado en el cuerpo del ensayo?
¿He relacionado mi conclusión con mi introducción?
Para obtener más consejos, consulta referencias y plagio, habilidades de escritura, estrategias de revisión y estrategias de estudio eficaces.
10. Comprobación de plagio en tu trabajo
Si sigues los pasos que se muestran en la sección Referencias y cómo evitar el plagio, estarás en una buena posición para pensar en tus referencias desde el principio y asegurarte de que estás tomando las medidas necesarias a lo largo de tu trabajo para lograr el éxito en las referencias. Sin embargo, si no estás seguro de haber hecho las referencias correctamente o si quieres estar tranquilo, puedes considerar la posibilidad de utilizar el Plagiarism Check que ofrecen algunas empresas.
Solo tienes que subir tu trabajo y, en 10 minutos, recibirás un informe personalizado en el que se resaltarán las áreas que te preocupen, a las que podrás volver y modificar antes de enviarlo.
Por ejemplo, el control de plagio de Scribbr detecta similitudes entre tu trabajo y la base de datos oficial de Ephorus (el verificador de plagio más utilizado por escuelas y universidades), que revisa 52 000 millones de fuentes de Internet, así como 159 millones de artículos científicos e incluso trabajos escritos por otros estudiantes.
Obtén más información y tu informe de plagio personalizado aquí: www.scribbr.com/plagiarism-check/
11. Estudiantes adultos: actividades de redacción
Esta sección se basa en la amplia experiencia de las dificultades de redacción que encuentran los estudiantes adultos.
Consulta los siguientes enlaces para obtener consejos y cuestionarios que te ayudarán a empezar con buen pie. Para más consejos, consulta la sección Habilidades de escritura.
Habilidades de supervivencia para la redacción de ensayos
Presta mucha atención a la pregunta: subraya las palabras y frases clave y luego aborda cada una de ellas sistemáticamente. Mientras trabajas, comprueba que sigues en el buen camino.
Trata tu ensayo como un trabajo en curso: no esperes visiones repentinas. Trabaja en una tarea a la vez: investigar, tomar notas, planificar, redactar una sección específica, etc. Construye gradualmente.
Destaca tu argumento: decide cuál es tu «opinión» sobre la pregunta y, al principio de cada párrafo, utiliza una frase como «Además», «A pesar de esto», «Como resultado», etc. Esto mostrará cómo lo que vas a decir a continuación se relaciona con lo que acabas de decir.
Basa tu argumento en hechos y en el trabajo de especialistas: tu opinión personal no obtendrá puntos sin pruebas sólidas.
Párrafos bien construidos
Un párrafo es un recuadro que contiene los elementos necesarios para explicar una idea. Los párrafos claros son esenciales para:
ayudar a demostrar tus puntos de vista
hacer que tu ensayo sea fácil de leer
Planificación de un ensayo:
un párrafo para la introducción
al menos un párrafo para cada tema tratado
un párrafo para la conclusión
Planificación de un párrafo:
una declaración clave
explicación, evidencia y/o análisis
un vínculo con el párrafo anterior
relevancia para la pregunta del ensayo
Párrafos problemáticos:
demasiado cortos (4 o 5 líneas o menos): añade más pruebas y análisis O incluye esta sección dentro de otro párrafo O elimínala por completo
demasiado largos (casi una página): encuentra un punto en el que dividirlo, añade un enlace y así facilitar la lectura de tu ensayo.
Para más consejos, consulta Poner la pluma sobre el papel.
¡Ayuda! ¡Quieren que escriba sobre mi vida!
Si te han pedido que escribas algo autobiográfico, no es porque alguien quiera entrometerse. Puedes omitir cualquier parte desagradable si quieres.
Es probable que tus tutores estén especialmente interesados en tus experiencias educativas. Así que si siempre sacabas malas notas o molestabas al director, puedes escribir sobre la escuela sin revelar todos los detalles.
El valor del trabajo autobiográfico radica en conseguir que:
desarrolles tus habilidades lingüísticas
mejores tu capacidad para estructurar un trabajo
desarrolles el uso de tus facultades imaginativas a través de la visualización y descripción del pasado
practiques ser objetivo
evalúes la experiencia personal en un contexto más amplio
mires tu propia experiencia de la historia en proceso.
Resúmenes y estilo
Te han pedido que resumas un artículo, indicando los puntos principales. Si tienes poco tiempo, probablemente harás una lista rápida y escribirás tus puntos con un poco de explicación. Esto puede evitarte problemas. Sin embargo, si tienes tiempo para hacer las cosas correctamente, sigue la guía que aparece a continuación.
Hay 5 pasos:
Lee el artículo una vez rápidamente.
Léelo una vez, despacio, tomando notas sobre los temas clave con tus propias palabras en la medida de lo posible (omitiendo cualquier ejemplo).
Escribe un borrador de resumen a partir de tus notas sin volver a mirar el artículo.
Comprueba el recuento de palabras y los datos, y recorta o amplía en consecuencia.
Copia tu borrador final.
Me encanta todo el artículo pero quiero destacar que la investigación es la base de cualquier ensayo: si no tienes nada que decir, ¿cómo puedes escribir un ensayo? Sin embargo, la investigación es un proceso con muchos componentes. La lluvia de ideas es una excelente manera de iniciar este proceso. Sin embargo, tus habilidades de lectura son tan importantes para la calidad de tu investigación como tus habilidades para tomar notas y un sistema de recuperación eficaz.